Edward Jenner
El médico que enseñó al mundo a temer menos a la viruela
Inglaterra, finales del siglo XVIII
La viruela era la pesadilla de Europa: desfiguraba, mataba y se propagaba sin control. Nadie sabía cómo detenerla, aunque la gente había notado algo curioso: las lecheras que contraían viruela vacuna parecían inmunes a la viruela humana.
Edward Jenner, médico rural de Gloucestershire, decidió investigar este fenómeno. En un tiempo sin antibióticos ni conocimiento de virus, su intuición sería su guía.
El experimento que cambió la historia
En 1796, Jenner tomó fluido de una lesión de viruela vacuna de una lechera llamada Sarah Nelmes y lo inoculó a un niño de 8 años, James Phipps.
- El niño se enfermó levemente, pero se recuperó.
- Luego, Jenner lo expuso a la viruela humana.
- Resultado: no enfermó.
Había descubierto la primera vacuna de la historia.
La polémica y la resistencia
Como siempre, las innovaciones radicales provocan miedo:
- Muchos lo acusaron de “brujería” o de experimentar con niños.
- La Iglesia y la prensa lo atacaron, algunos pensaban que era peligroso “inyectar vacas en humanos”.
Pero Jenner fue persistente: documentó sus casos con rigor, publicó sus resultados y comenzó a difundir la práctica. Con el tiempo, su método se extendió por Europa y el mundo.
El impacto
Gracias a Jenner:
- La viruela pasó de ser una enfermedad temida y devastadora a la primera enfermedad erradicada por completo en 1980.
- Salvó millones de vidas, y su descubrimiento sentó las bases de la vacunología moderna.
“He conmovido a la humanidad más que yo mismo podría imaginar.”
Edward Jenner nos recuerda que la observación simple, combinada con coraje y método, puede cambiar la historia de la humanidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario