sábado, 10 de junio de 2023

Ha-Joon Chang

 


El pobre balance de crecimiento de la globalización neoliberal desde la década de 1980 resulta particularmente penoso. Acelerar el crecimiento -en caso necesario al precio de aumentar la desigualdad y posiblemente cierto incremento de la pobreza era el objetivo declarado de la reforma neoliberal. Nos han dicho reiteradamente que primero tenemos que "crear más riqueza" antes de poder distribuirla de un modo más extenso y que el neoliberalismo era la manera de hacer eso. Como consecuencia de las políticas neoliberales, la desigualdad en las rentas ha aumentado en la mayoría de países como estaba previsto, pero el crecimiento se ha frenado de hecho considerablemente. Además, la inestabilidad económica se ha incrementado notablemente durante el período de predominio neoliberal. El mundo, especialmente el subdesarrollado, ha conocido crisis financieras más frecuentes y a mayor escala desde la década de 1980. Dicho de otro modo, la globalización neoliberal no ha cumplido lo prometido en todos los frentes de la vida económica: crecimiento, igualdad y estabilidad. A pesar de ello, no dejan de decirnos cómo la globalización neoliberal ha aportado unas ventajas sin precedentes. La tergiversación de los hechos en la historia oficial de la globalización se pone de manifiesto también a nivel de país. Contrariamente a lo que la ortodoxia quería hacernos creer, prácticamente todos los países en vías de desarrollo prósperos desde la Segunda Guerra Mundial tuvieron éxito en un principio mediante políticas nacionalistas, utilizando protección, subvenciones y otras formas de intervención del gobierno.


No hay comentarios:

Publicar un comentario