martes, 17 de noviembre de 2020

Victor Hugo


 Juveniles amores, que duraron tan poco,

sois el alba de nuestro corazón, hechizad
a aquel niño que fuimos con un éxtasis único.
Y al caer de la tarde, cuando llega el dolor,
consolad nuestras almas, deslumbradas aún,
juveniles amores, que duraron tan poco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario