"No creo en Dios y no me hace ninguna falta. Por lo menos estoy a salvo de ser intolerante. Los ateos somos las personas más tolerantes del mundo. Un creyente facilmente pasa a la intolerancia. En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta, las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen a Dios. Por el contrario solo han servido para separar, para quemar, para torturar. No creo en Dios, no lo necesito y además soy buena persona".
Qué grann verdad! Por cierto, me encanta tu blog, es muy interesante e inspirador. Gracias!!
ResponderEliminarGracias!!!.... espero que aprendamos algo... Saludos...
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